La Impotencia es la falta de poder o fuerza de copulación en el hombre. Sin embargo, se refiere a la incapacidad física y constante de realizar copula, engendrar y concebir, que se asocia con la falta de la libido.
La nutrición juega un papel muy importante para la producción hormonal, especialmente las vitaminas A, E y del complejo B, el zinc y los ácidos nucleicos.
Para aumentar el vigor sexual se recomienda consumir borojó, chontaduro, ostras, germen de trigo, aceite de germen de trigo, semillas de ajonjolí, miel, semillas y frutas secas, leche, algas marinas, damiana, aceite de hígado de pescado, lecitina, ajo, suero y fórmulas de multivitaminas y minerales; pero sobre todo, una dieta natural, pues el vigor sexual es manifestación del optimo estado de salud.
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Otros productos que también se usan para el tratamiento de la impotencia son: el saw palmetto, la yohimbina, la gotukola, el ginseng brasileño, el guaraná, la DHEA, baños de asiento con agua fría, entre otros y, para este mundo de estrés, la relajación psicosomática y el yoga.
Hay factores que inciden en forma negativa disminuyendo gradualmente la capacidad sexual, como fumar o beber alcohol, lo mismo que los residuos hormona les en huevos y carnes, y pesticidas que pululan en los alimentos; también influyen grandemente para que se manifieste la impotencia, la actitud mental negativa, la falta de confianza, la baja autoestima, el ambiente familiar inadecuado en la niñez, el miedo y la preocupación, igual, la edad y las épocas de la vida hacen variar el deseo y la actividad sexual.
Fuente: Diccionario Naturista. Naturaleza y Vida.