Para invitar a un inversionista a nuestro negocio, debemos tener una excelente preparación, para exponer sobre que se trata nuestro negocio, y lo más importante tener una buena información, para que éste, tenga claridad sobre lo que se le está ofreciendo.
Lógicamente no tiene que ser una presentación espectacular (en recursos), pero sí hacer énfasis en el por qué se va a confiar en él, esto es algo muy importante.
Un gran error que se puede cometer ante un inversionista, es hablar sobre lo que ofrece, sin tener la menor idea por qué lo hace, o cual es el problema del mercado que pretende resolver, por esta razón, lo mejor es estar bien informado sobre lo que ofrecemos, poder probar que lo que estamos diciendo es verdad, y que las utilidades pueden llegar a ser muy buenas, además que es un servicio que realmente necesita la gente para mejorar su condición en el mercado actual.
Otro aspecto, es mostrar pasión por lo que se hace, ponerle mucha energía positiva, hablar con propiedad y mucha seguridad, sin dudar, que lo que se está haciendo va a tener mucho éxito, nunca dar a entender que decidimos emprender un negocio, simplemente porque no había otra opción, porque eso indica, que se hizo por necesidad y no porque realmente sí queríamos emprender algo innovador que fuera a impactar en el mercado competitivo, esa no es la actitud.
Lo mejor es estar frente a frente con el nuevo emprendedor, para conocerlo bien, estar seguro de que realmente cuenta con una buena inversión, que contribuirá en el asesoramiento para proyectos innovadores que sean escalables, y de gran proyección.
También se debe saber, como va a financiar un apoyo diligente para la empresa, si es así, convencerlo con ejemplos reales, que suceden en la práctica, para que las cosas que se plantean no queden solo en palabras sino también en acciones concretas.
Aparte de todo lo anterior se tiene que demostrar que se cuenta con un excelente equipo de personas que tienen la formación y la capacitación suficiente para dar los mejores resultados
Y por último mostrar cual es el estado actual de la empresa, cuál es su realidad en el momento y como cambiará en el futuro si entra a formar parte del proyecto.